Jamundí, Agosto 01 de 2018
El territorio ancestral El Peón, ubicado en zona rural del Municipio de Jamundí – Valle, fue fundado hace más de cien años por hombres y mujeres negras con la firme intención de consolidar un proyecto de vida colectivo e individual para sus habitantes y renacientes. En el marco del derecho fundamental a la autodeterminación y la participación como parte del pueblo negro de Colombia, nuestra comunidad se organizó como Consejo Comunitario amparando así sus derechos colectivos en la Ley 70 de 1993.
Nuestra comunidad históricamente ha estado conectada con el municipio de Jamundí por medio de un camino ancestral que hemos cuidado, limpiado, desyerbado y adecuado. Por ese camino transitaron vivos nuestros ancestros y ancestras y por él los cargamos en nuestros hombros para sepultarlos en el Municipio de Jamundí; como también lo hicieron los habitantes del Corregimiento de Pance, siendo este el primer medio de conexión de dicho corregimiento con Jamundí.
Hechos:
Nuestro camino ancestral colectivo atraviesa predios de La Hacienda Quesadas, propiedad de la familia Borrero, la cual emplea sus tierras para la ganadería y el alquiler a ingenios para el cultivo de caña. Desde hace ocho años esta familia ha querido restringir el tránsito por nuestro camino, ubicando avisos de “prohibido el paso” y colocando una puerta metálica que limitaba el acceso a nuestro territorio. Ante esta grave violación del derecho al territorio e intento de despojo de nuestro camino ancestral, en enero de 2018 junto con la Vereda Chontaduro que también estaba siendo violentada por estos hechos y estaba exigiendo una vía para su comunidad, informamos a las autoridades competentes y tanto los avisos como la puerta metálica fueron retirados; https://youtu.be/-dEDc1bjc-Q
A raíz de la situación como comunidad del territorio étnico Peón, realizamos distintas solicitudes para lograr que la administración municipal de Jamundí y la Gobernación del Valle del Cauca nos reconociera el derecho colectivo a nuestro camino ancestral como una vía vehicular como lo estipula la escritura pública número 60 de 1959 de la Notaria cuarta de Cali; y al mismo tiempo nos garantizara el derecho fundamental a la vida, la salud, la movilidad social, la educación, el trabajo, etc., derechos que han sido vulnerados históricamente por la falta de una vía en buen estado que nos conecte a Jamundí, pero hasta la fecha no hemos obtenido respuesta satisfactoria.
Amparados en nuestros derechos colectivos, y en el ejercicio del gobierno propio, desde el mes de abril de 2018 decidimos realizar mingas comunitarias para adecuar nuestro camino ancestral de manera autónoma. El pasado domingo 29 de julio de 2018, en horas de la mañana mientras nos encontrábamos en una de nuestras mingas, fue enviada una patrulla de la Estación de Policía de La María (Cali), la cual nos indicó que debíamos parar el trabajo de adecuación del camino porque no contábamos con permisos para hacerlo.
Imagen: Minga por nuestro camino. El Peón, 29 de Julio de 2018.
Imagen: Minga por nuestro camino. El Peón, 29 de Julio de 2018.
Convencidos de nuestros derechos continuamos el trabajo de adecuación, y en horas de la tarde de ese mismo día fue enviada nuevamente una patrulla integrada por dos motocicletas y dos vehículos de la policía para impedir la labor de mejoramiento del camino.
Imagen: Patrulla de la policía en minga por nuestro camino. El Peón, 29 de Julio de 2018.
El día de hoy 01 de Agosto, la corregidora de Pance, nos indica que la familia Borrero instauró una querella policial en la inspección de policía de Pance, para evitar que continuemos con la minga para adecuar nuestro camino ancestral.
Ante las frecuentes y preocupantes acciones de hostigamiento por parte de la fuerza pública, y los hechos violentos de intento de despojo por parte de los actores privados, hacemos un llamado de alerta a la Defensoría del Pueblo Regional Valle, a la Personería Municipal de Jamundí y la Procuraduría étnica, para que cumplan su rol constitucional como garantes de derechos y acompañen a nuestra comunidad en este vital propósito.
A la oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (ONU-DDHH), para que sirva de garante y acompañe nuestro ejercicio de gobernanza. A la Gobernación del Valle y la Alcaldía de Jamundí para que garanticen el derecho a la integridad cultural de nuestra comunidad y los derechos colectivos, al territorio, la identidad, la participación, la organización y la autonomía.
A las organizaciones hermanas; Consejos Comunitarios del Norte del Cauca, Cali y Buenaventura, La Guardia Cimarrona, Organizaciones Étnico territoriales, Organizaciones de Derechos Humanos y Medios de comunicación, para que nos acompañen en la minga del camino que continuaremos desarrollando hasta culminar el trabajo.
Ancestralmente,
Consejo Comunitario El Peón Junta de Acción Comunal El peón
…Seguimos, tras las huellas de nuestras y nuestros cimarrones. Porque el territorio es la vida, y la vida no se vende, se ama y se defiende.